Había una vez tres amigos muy diferentes los amigos eran: Pepito el conejo, Doris la paloma y Lucas el pavo real.Todos vivíanen un campo muy lindo y todos eran muy felices.
Todos eran muy importantes, pero Doris se sentía insignificante, porque Pepito repartía los huevitos de chocolate a los niños en la pascua de resurrección, Lucas adornaba el paisaje con sus hermosos colores.
Un día, Pepito amaneció muy enfermo y nadie sabía como ayudarlo, entonces se le ocurrió una idea a Lucas: habló con Doris para pedirle que volara a buscar un doctor. Ella sin pensarlo voló lo más rápido que pudo.
Llevó Doris, el doctor donde estaba Pepito, él lo sanó y el doctor le dijo a Doris la paloma: “Gracias a tu rapidez Pepito se salvó”.
Desde ese momento, Doris supo que también era importante.
Todos eran muy importantes, pero Doris se sentía insignificante, porque Pepito repartía los huevitos de chocolate a los niños en la pascua de resurrección, Lucas adornaba el paisaje con sus hermosos colores.
Un día, Pepito amaneció muy enfermo y nadie sabía como ayudarlo, entonces se le ocurrió una idea a Lucas: habló con Doris para pedirle que volara a buscar un doctor. Ella sin pensarlo voló lo más rápido que pudo.
Llevó Doris, el doctor donde estaba Pepito, él lo sanó y el doctor le dijo a Doris la paloma: “Gracias a tu rapidez Pepito se salvó”.
Desde ese momento, Doris supo que también era importante.
2 comentarios:
Está muy lindo tu cuento...nos gustó demasiado!!! tus primas que te quieren mucho!!!
Graciela y Viviana
hola cony soy la josefa te salio super bien el cuento chao que te valla bien
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